Cebrián se embolsa 13 millones de euros anuales, despide al 30% de la plantilla de El País y los trabajadores afectados se quejan porque "los despidos vulneran los principios deontológicos del Libro de Estilo de El País". [Supongo que, recíprocamente, el delito de alzamiento de bienes del Código Penal se aplicará a aquellos que cometan faltas de ortografía].
Otro aún más gracioso: Un sindicato de periodistas denuncia que "El País perderá prestigio con los despidos".
Entre informe e informe del FMI, una mañana simpática. [Por supuesto, mis por una vez sinceras condolencias para las víctimas, trágicamente desafiliadas del enemigo en un acto].
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1 comentario:
"Laughter demolishes fear and piety before an object"
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