La aprobación del Plan de Ajuste a lo FMI es un punto de no retorno. La restauración del sector privado y el capitalismo, el despido en masa y la condena a los trabajadores a unas inexistentes relaciones económicas mercantilizadas conllevan mi distanciamiento emocional completo de la isla. Porque comenzar a defender a Cuba de la misma manera que se defiende a Bielorrusia sería doloroso. La Historia, la que absuelve o no, importa. Y la realidad también importa.
Se está acabando el socialismo en el Caribe. Pero Libertad para los 5, todavía.
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