miércoles, 28 de marzo de 2018

NOAM CHOMSKY

Cumplir noventa años, mirar al desierto de Nevada, sentarse tras la puerta tranquila de la placa que informa "Laureate Professor". Siempre le tuve manía a Noam Chomsky, pero ahora, fuera de la opresión del MIT, le tengo sólo sana envidia.
Más allá de su discutible firma en los más variados manifiestos, de la ligereza de algunos de sus posicionamientos, escondida detrás del título de most famous intellectual of the world, de sus contradicciones... Sus contradicciones. Meros fallos del observador. Al menos en muchos casos. Eso he llegado a comprender. Que su teoría lingüística tiene como prerrequisito su anarquismo. Y que éste, insospechadamente, también permea los elementos "positivos" o propositivos de su crítica. Que no hay separación entre la dimensión utópica y no utópica de su política. Todo es uno. Mirando al desierto de Nevada.
Así quiero envejecer.

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