Europa como encrucijada amenazada, no por refugiados e inmigrantes, sino por tres monstruos autocráticos: China, Rusia y EEUU.
Morozov también piensa algo parecido. La tendencia a la centralización del capitalismo digital, conectándose a esas estructuras. Y las dictaduras dinásticas del Golfo, con su gigante masa financiera, como vector de caos y poder brutal inmediato en forma de golpes globales.
En el underground, la política subterránea de los que conservamos la izquierda, inquieta, semiextinguida, letárgica pero nunca letárgica.
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