El Partido Comunista Griego (KKE), para justificar su inoperancia política y electoral en tiempos prerrevolucionarios, emite comunicados en los que se muestra obsesionado con la clase social y la pureza de los principios que, según proclaman, aunque no le importe al pueblo griego, sí le importa al Partido. Resulta bastante curioso que, en un país en el que con la quiebra y la imparable movilidad social descendente ya nadie sabe a ciencia cierta de qué clase social forma parte, haya quienes sólo hablan de clase, con un discurso divisivo que pretende tildar de imaginarios socialdemócratas a sus competidores anticapitalistas de Syriza.
Y, a todo esto, ¿para que la clase social sea un concepto teórico y una realidad operativa no necesita una relativa predecibilidad de la pertenencia a la clase, una estructura social cognoscible?
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1 comentario:
Por máis que nos fagan rir certas palabras rematadas en -ado, se cadra hai que lles recoñecer o valor de tentar pensar o común desde lugares novos. Creo que ti atinas ao situar o problema: se a palabra para nomear o común se estreita deixa de nomear o común, e se se abre demasiado deixa de ser precisa (ou efectiva). Qué facer non o sabemos, pero coido que algo se gaña con pensar...
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