domingo, 3 de febrero de 2019

Guevarismos

Fue en un encuentro de solidaridad con Cuba. Se celebraba en un castillo, en un islote contiguo a la playa. Por la mañana nos acercaron en pequeñas barcas. Por la tarde la marea había bajado y se volvía caminando. Yo llevaba muletas y no conseguía mantenerlas sobre la arena. En estas, me trabé, me quité los zapatos y me encharqué los pies. Un rato después, superado el periplo, la hija del Che me trajo unos calcetines.
Supongo que para mí el socialismo es eso: el guerrillero heroico, un bloqueo y calcetines secos para quien los necesita.

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