A la presumible entidad cósmica que deja pistas insondables para que guíen mi vida sólo tengo una cosa que decirle: Esto es jodidamente raro.
Tenía pensado escribir sobre el vendido de Spike Lee, los resquicios de dignidad de Jean-Luc Godard, la muerte del gran Bo Didley y su memorable concierto de 1993 o los cabrones sociatas (es pleonasmo). Dentro de unos días lo intentaré, una vez retomadas las circunvalaciones de mi camino recto in the shade of Qur´an y completamente alejado de la geometría.
Sí, ya liberado del horror ministerial (el horror, el horror), pronto podré volver a escribir: Gabba Gabba Hey.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
cheguei ao teu blog por puro azar, e acabas de darme a alegría do día, talvez da semana: había tempo que non lía algo tan vermello e tan hoxe.
Saúde, tovarich!
lucretius
Os galegos revolucionarios son sempre benvidos. Saúde e Patria.
Alí Omar
Publicar un comentario